Tal parece que el Frayba y secuaces como los de la Otra Campaña, ahora andan dando malos consejos de nutrición, y es que no es de sorprenderse que les convengan tener a su gente así, en una mala condición de salud que les impida tener sus ideas lúcidas y les permita ver que lo único que hacen es usarlos para causas que al final ni ellos mismos entienden. Lo grave aquí es que al ver que su voz pierde fuerza (porque el pueblo ya no quiere que le pisoteen sus derechos), unen al morlote a otras organizaciones afines en ideas (bueno, si es que las tienen) y personas de otros países, a quienes hacen “el favor” de mal informar. Señores, ponerse a dieta de ideas es la peor forma de “defender una causa”, (bueno, aquí ni la hay), porque, si con auto castigarse con no comer se absolvieran los crímenes, pues estaríamos llenos de criminales muy delgados.
Pareciera que para estas organizaciones, esto de alentar la huelga de hambre es un juego divertido – que atenta con la integridad de las personas- y es que, ¿cómo es posible que se den golpes de pecho por defender los derechos de las personas si ellos mismo alientan a que se auto castiguen?, acaso en esta dieta de ideas, se les acabo la inteligencia para poder razonar.
Quien los entiende, claman una justicia a conveniencia, entre sus peticiones vuelve a resaltar la liberación de Alberto Patishtán, principal cabecilla del movimiento "la voz del Amate”, Señores “donde van a pensar eso”; si el susodicho en cuestión no está en la cárcel sentenciado a 60 años, por buena gente, sino por el delito de homicidio. Entonces, que le decimos a las victimas de sus acciones (si, porque si hay victimas de ello), “Disculpe Usted, lo dejamos salir porque ya estaba muy flaquito, si usted está en desacuerdo, pónganse en huelga de hambre, para que le hagamos justicia”, ¿sería una respuesta muy vaciada no? Si de verdad defienden los derechos y la justicia, dejen que esta siga su curso y aprendan a asumir las responsabilidades de sus actos y dejen de usar a este grupo de personas, engañándolos, haciéndoles creer que su “sacrificio”, salvará su “causa”, que esto servirá como amenaza frente al Gobierno, un Gobierno que ya abrió mesa de diálogo para que organizaciones como el Frayba dejen de lanzar convocatorias mal dirigidas y mejor centren sus fuerzas en hallar soluciones a las verdaderas necesidades del pueblo.
Usar la salud de las personas para chantajear y conseguir sus mal intencionados propósitos, ya es un recurso muy bajo. Pretender doblegar un sistema legal con “estrategias” como estas, es una clara muestra de que la manipulación es una de las principales herramientas de estas organizaciones. Chantajear con la salud de otros, para que el beneficio sea de unos cuantos es una verdadera acción que atenta contra los derechos.
Acomodar la realidad a sus intereses es muy fácil, asumir las consecuencias de sus actos es la parte complicada que no logran entender, claman justicia, pero cuando esta actúa responsabilizándolos por lo que hacen, entonces, esa misma justicia que tanto aclaman, se vuelve su enemiga y por lo tanto una realidad que no están dispuestos a asumir y contra la que, -atentando a la lógica- luchan utilizando a otros, buscando que la justicia pase por alto sus acciones y sólo busque premiarlos, haciéndolos simultáneamente, mártires.
Ojalá estas personas reaccionarán y despertaran a la realidad, una realidad en la que únicamente son usados, porque yo no creo que todas las organizaciones que firman de “apoyo” también se estén negando alimentos, seguramente deben estarlos viendo auto castigarse acompañados de sus tres comidas diarias
Ojalá reaccionen, que en estas acciones de huelga, no hay vencedores ni vencidos, solo perjudicados, su misma gente, al atentar contra su persona negándose alimentos. En lugar de convocar que apoyen esta huelga y a la par, fomentar a esta dieta de ideas, deberían convocar a alimentar acciones que abran caminos de solución, donde cada quien asuma la responsabilidad de sus actos y de verdad se busque respetar el derecho de las personas.
Señores que creen en estas organizaciones, un verdadero líder no permitiría que su gente sufriera para su beneficio, un verdadero líder no estaría demasiado inmerso en sus propios intereses como para no ver que está dañando el derecho de los demás. Un verdadero líder, inspira no azuza, incentiva no manipula, conduce no obliga, entiende a su gente como seres humanos con sueños y propósitos, no como una masa de personas que puede llevar al borde de atentar contra su salud para fabricar una amenaza y lograr su beneficio.
Esperemos que desistan de su dieta de ideales y alimenten sus organizaciones con buenas dosis de humildad, que entiendan que emitir convocatorias de esta índole no resulta en mas que, sacrificios innecesarios, todo porque los dirigentes se olvidan que están al frente no para ser servidos sino para servir y velar por los derechos de quienes hacen el favor de seguirlos, no se olviden que Lo que hacemos es resultado directo no sólo de qué y cómo pensamos, sino también de qué y cómo sentimos." (Warren Bennis.) y se me hace que el Frayba y compañía no se deben sentir muy bien!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario