Al ataque de San Cristóbal de las Casas

Desde que en el 94 surgiera ante los ojos del mundo el movimiento zapatista de liberación nacional (EZLN) encabezado por el sub comandante Marcos y que poco a poco fue yendo a menos, no se habían registrado ataques epistolares en contra de distinguidos sancristobalences hasta hace algunos días cuando el enmascarado “protector” de indígenas chiapanecos salió de nuevo al embate pero ahora desde las redes sociales.

Y es precisamente en twitter (@elsubmarcos), donde el Sub ha hecho señalamientos de todo tipo y en contra de medio México pero muy en lo particular contra la señora Socorro Zebadúa, incansable luchadora social y promotora de los valores chiapanecos y sobre todo, coletos. ¿Qué estará buscando ahora? ¿Colocarse políticamente como lo hizo su hermana en la Cámara de Diputados Federal?

O es que todo esto tiene que ver con algún foco amarillo que debamos de prender en Chiapas con este levantamiento electrónico de Rafael Sebastian Guillén Vicente y la llegada al Centro de Readaptación Social número 5 de SCLC de Alberto Patishtán (adherente del movimiento de “La Otra Campaña”) después de haber estado nueve meses en el penal de máxima seguridad en Guasave, Sinaloa. Y es que todo esto tiene su lógica, por algo los defensores del Frayba habían sido tan insistentes en el retorno del señor Patishtán, que tiene un negro expediente desde su detención en el 2000 después de la terrible emboscada que sufrieran policías estatales en el municipio de El Bosque y por el que a Patishtán Goméz le quedan 48 años de condena.

Esperemos que el profesor Patishtán no haga de las suyas, pues al interior de los cuatro reclusorios en donde ha estado ha participado en diferentes movimientos y al final él dice ser la víctima. Pues al paso que vamos Patishtán va que vuela para convertirse en un preso cibernético como en sus mejores tiempos de reo lo fuera Pablo Salazar.